Hablar de un lapiz es como hablar de un hombre, ya que el lapiz te puede gustar por como dibuja y escribe con sus diferentes colores y ÉL se hace gustar por su mirada matadora y su sonrisa picara.
Existe una gran variedad de lapices, los hay de distintas marcas, colores, tamaños, al igual que ellos, están los rubios, morenos, colorados, de ojos claros u oscuros, altos o bajos. Y a pesar de eso hay algo en los lapices que es exactamente igual y eso es la ESENCIA , si le quitaramos esa mascara que los cubre descubriríamos que están hecho de lo mismo,MADERA,y son SOLO LAPICES; y es como ELLOS, si les sacaramos esa careta divina nos dariamos cuenta de que tienen una caracteristica muy en común y es que SON IGUALES, lo llevan en la sangre, SON HOMBRES.
Al lápiz se le puede sacar punta de ambos lados y asi dibujar y el hombre hace algo similar,juega a dos puntas y se escribe historias con doble caras. Con el lapiz corres el riesgo de pincharte por culpa de una de sus puntas cuando con el hombre ese riesgo no existe ya que la herida la tenes asegurada.
Pero ¿ si la punta se gasta o se quiebra?
Eso no es problema, se saca mas y ya tiene de nuevo, el mismo caso con los susodichos, si se cansan de la mina o simplemente eso se quiebra, sacan mas y tienen una mina nueva.
Y EN NUESTRO CASO SI EL LAPIZ NO NOS GUSTA MAS O LA PUNTA SE QUIEBRA, LO TIRAMOS A LA BASURA Y COMPRAMOS UNO NUEVO ;)
By Aili Broda ;)
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